Desde que los vikingos dejaron de salir de su territorio para saquear las costas británicas en busca de mujeres y botines que les permitieran llevar una vida lujosa, los duros meses de invierno se han tornado vanos y sin sentido. Ahora, las botellas Vikingfjord son poco más que agua bendita y el patinaje deporte nacional. Como reza un dicho popular el “vodka hace a los rusos más rusos” y a los noruegos vikingos refinados.
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